No hay mal que por bien no venga.

A principios de año, me llevé una desilusión profesional. Aquellos que me conoceis, sabeis a que me refiero. En esos momentos, tenía miedo. Pasé, junto con algunos compañeros, momentos de angustia, ya que a veces la comodidad hace que creas que no necesitas nada mas que lo que nuestros pobres ojos alcanzan a ver. Nada más lejano de la realidad. Tenemos que alejarnos un poco de ese muro formado por la vida que vivimos en ese momento, para ver las cosas que hay detrás. El tiempo ha pasado, el muro está lejos, y veo que detrás hay muchas más cosas de las que creía y que merecen la pena disfrutarlas. Primero, los Aslandticos. Ahora, Vanesa Martín. El próximo jueves 31 de Mayo trabajo en Málaga con ella, desde donde escribo este post. Gracias Pipi, por apoyarme. A todos vosotros, amigos y colegas también. Aquí va el video de un temita de Vanesa Martín. Seguro que os suena.